53) Olimpia.
OLIMPIA
(OLYMPIA, 1938)
DIRECTORA: LENI RIEFENSTAHL
Sinopsis.
Documental sobre los Juegos Olímpicos celebrados en la ciudad de Berlín en 1936. Dividido en dos partes: Fest der Völker (Fiesta de los Pueblos u Olimpiada) y Fest der Schönheit (Fiesta de la Belleza o Juventud Olímpica). El atletismo es el protagonista de la primera, mientras que el resto de deportes están incluidos en la segunda.
Aspectos interesantes
-
Fue un verdadero hito cinematográfico ya que nunca antes se habían filmado unos Juegos Olímpicos. Cabe destacar los avances técnicos y de producción utilizados por Riefenstahl en este trabajo, siendo pionera en la utilización de medios y formas de rodaje y post produción muy recurrentes hoy día en las producciones audiovisuales pero indudablemente innovadoras en la época.
-
Obtuvo el premio al mejor film del Festival de Venecia (1938) y la Medalla de Oro del Comité Olímpico Internacional (COI). En 1960 fue votada como una de las diez mejores películas de todos los tiempos.
-
Si el prólogo de Fest der Völker comienza con imágenes de ruinas de templos griegos, diversas esculturas como el Discóbolo de Mirón que se transforma en un cuerpo humano real, figuras femeninas desnudas danzantes o el fuego olímpico, que un atleta recoge con una antorcha para llevarlo hasta Berlín, el de Fest der Schönheit muestra una serie de desnudos masculinos en una sauna o bañándose en un lago, así como los diversos momentos de esparcimiento o entrenamiento de los atletas en la villa olímpica. Si en la primera parte se sugiere la relación entre el pasado esplendoroso y el espíritu de la causa nazi, en la segunda, en un tono más poético, se glorifica a la raza aria, mediante el culto hacia el cuerpo humano.
-
Imprime un punto de vista narrativo al acontecimiento, combinando las pruebas deportivas con imágenes del entorno y el uso del sonido, creando de este modo una mayor tensión emocional.
-
Existe una leyenda urbana en la que se afirma que Hitler rehusó dar la mano a Owens. Lo que mucha gente ignora es que Hitler sólo felicitó personalmente a los dos primeros ganadores de los Juegos y no repitió las felicitaciones con nadie más. El propio Jesse Owens afirma en sus memorias que recibió una felicitación oficial por escrito del gobierno alemán, y que sin embargo el presidente Franklin Delano Roosevelt
no invitó al atleta a las celebraciones en la Casa Blanca,
puesto que estaba inmerso en las elecciones y necesitaba el voto del sur estadounidense.
-
Otra leyenda urbana es que los Juegos Olímpicos fueron un momento de humillación para el régimen nazi porque algunos atletas negros consiguieron un gran número de medallas. En realidad, la competencia no constituyó una humillación para la Alemania nazi ya que el país anfitrión lideró el medallero.