50) La muerte tenía un precio.
LA MUERTE TENÍA UN PRECIO
(PER QUALCHE DOLLARO IN PIÙ, 1965)
DIRECTOR: SERGIO LEONE
INTÉRPRETES PRINCIPALES:
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CLINT EASTWOOD: EL MANCO
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LEE VAN CLEEF: CORONEL DOUGLAS MORTIMER
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GIAN MARIA VOLONTÉ: EL INDIO
Sinopsis.
Dos cazadores de asesinos, rivales entre sí al principio, acaban por unirse para conseguir una misma presa, El Indio, un peligroso y sanguinario bandido por el que se ofrece la más alta recompensa conocida. Cada uno tiene motivos diferentes para dar caza al bandido, uno, su obsesión por conseguir el dinero que ofrecen, y el otro, para vengar el asesinato de su hija a manos del brutal asesino. También sus estilos son distintos, aunque infalibles, uno rápido y el otro frío y técnico.
Aspectos interesantes
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Segunda entrega de la llamada trilogía del dólar después de Por un puñado de dólares. Luego vendría El bueno, el feo y el malo.
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Sergio Leone quería en principio a Lee Marvin para el papel del coronel Mortimer. También consideró a Robert Ryan para ese papel.
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Lee Van Cleef presumía de ser más rápido que Clint Eastwood. Le llevaba tres fotogramas desenfundar, apuntar y disparar.
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El apodo de El Manco para el papel de Clint Eastwood no es porque le falte una mano, sino que sólo usa la derecha para disparar, siempre sobre el revólver y escondida bajo el poncho. La izquierda para pelear, beber o lo que sea.
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El poncho de Clint Eastwood nunca fue lavado durante la trilogía del dólar, aunque sí tuvo algún que otro remiendo. Al final de la anterior entrega recibía varios disparos a la altura del corazón. En esta película se pueden apreciar los remiendos debido a los agujeros de bala.
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La música, escrita y dirigida por Ennio Morricone, en la línea de la película anterior, añade instrumentos nuevos, como las castañuelas, y efectos innovadores (pulsación única de una sola tecla grave del piano, acordes secos de guitarra, carrillón musical del reloj de bolsillo, sonidos ásperos de látigo). El silbido humano adquiere mayor importancia y se combina con otros sonidos (flauta, altos de soprano). Su ejecución corre a cargo del cantante español Kurt Savoy.
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Es una obra más elaborada que Por un puñado de dólares, gracias a una mayor disposición de tiempo, mejor preparación, más experiencia y un presupuesto menos ajustado.
