Noticias Carlos Taberner, nuevamente campeón en Austria. La cabellera de Berenice y el cetro de Bergheim.

Carlos Taberner, nuevamente campeón en Austria. La cabellera de Berenice y el cetro de Bergheim.

Son las 12 de la noche y se les puede ver ahora mismo. Se les puede ver, a Pepe Aupí y Carlos Taberner, ahora mismo, en tierras austríacas. Allí están, contemplando la Osa Mayor, trazando una línea imaginaria de Merak a Dubhé y encontrando la Osa Menor y la Estrella Polar, inmutable desde hace tres mil años. Observando en la oscuridad de la noche todas aquellas luces, planetas y soles girando lentamente allá arriba, en la bóveda celeste que se despliega sobre ellos.

Allá arriba está el GIGANTE ORIÓN persiguiendo al TORO; ANDRÓMEDA encadenada a una roca; CASSIOPEA sentada en su trono; BETELGEUSE brillando en el hombro del CAZADOR; el CISNE volando mientras debajo nada la figura hermosa del DELFÍN; más allá, la CABELLERA DE BERENICE mecida por el viento de la noche...  

Mirando ese cielo que parece burlarse de tantas cosas del mundo terrenal, Pepe y Carlos recuerdan que la luz recorre 300.000 kilómetros por segundo y que la luz de aquella estrella que miran ahora, la Polar, ha tardado casi cinco siglos en llegar hasta ellos.

Hace tiempo que Pepe Aupí y Carlos Taberner contemplan ese cielo en apariencia impasible, dándose cuenta que ellos también deben fabricarse su propio universo de estrellas. De hecho, cada uno de nosotros debería hacerlo.

Y cuando llegue el final de sus días, y sus ríos desemboquen en esa orilla de la nostalgia, la melancolía y el recuerdo, Pepe y Carlos volverán a mirar arriba y descubrirán un universo repleto de estrellas propias. Allí arriba descubrirán muchas constelaciones de estrellas, y entre ellas, unas creadas al calor de un verano de 2012: el caballo victorioso PEGASO cabalgando, cataclop, cataclop, cataclop... hacia la victoria en el Marca Jóvenes Promesas de Valencia; la CORONA DE HAID brillando como nunca; el CETRO DE BERGHEIM empuñado con mano firme y poderosa...

Entonces, sólo entonces, recordando esos momentos y muchos otros que están por venir, Pepe y Carlos se mirarán el uno al otro, aflorará en sus labios una sonrisa cómplice y muy emotiva, y se dirán que ha valido la pena.

Pepe Aupí y Carlos Taberner, campeones este verano del Marca Jóvenes Promesas de Valencia y de los Tennis Europe de Haid y Bergheim. PEPE AUPÍ y CARLOS TABERNER, simplemente inmortales, sencillamente eternos. 

LA CABELLERA DE BERENICE. Estaba yo recién cortada y mis hermanas me lloraban cuando, de pronto, con un rápido batir de alas, el dulce soplo del céfiro me lleva a través de las nubes del éter y me deposita en el venerable seno de la divina noche Cypris. Y a fin de que yo, la hermosa melena de Berenice, apareciese fija en el cielo brillando para los humanos en medio de innumerables astros, Cypris me colocó, como nueva estrella, en el antiguo coro de los astros. (Poema de Calímaco de Cirene, 310 AC-240 AC).

En Bergheim (Austria) conquistaron el segundo título consecutivo del circuito de Tennis Europe Sub-16.

Entrega de trofeos junto al juez de silla y el serbio Filip Grbic, rival de Carlos Taberner en la gran final de la localidad austríaca de Bergheim.

Carlos Taberner también conquistó el título de dobles junto al australiano Gonzalo Morell Raschiatore.

Foto de familia de los premiados en las pruebas de dobles masculina y femenina.

El cetro de Bergheim, firmemente empuñado por Carlos Taberner, será en el futuro una de las constelaciones de estrellas que Carlos y Pepe contemplarán con orgullo.

Universo de estrellas de Pepe Aupí y Carlos Taberner, figuras inmortales y eternas de juegatenis.com.